La lluvia trae el sosiego
de las cosas,
ese impasible acontecer
de la tarde que se decide a estar
sin más preámbulo.
Acodado está el recuerdo
en el rincón más íntimo
de nuestra galería de sueños.
Paso a paso el tiempo
desempolva caprichos,
acapara espacios vacuos,
colmándolos de asfixia.
Se estaciona en el perfil
de los objetos
y parece detenido
provocando desamparos.
Cada minúsculo segundo
se eterniza,
convoca desalientos,
perpetúa desencantos.
En la inercia de la espera
nos sorprende la noche
y una angustia nocturna
nos alerta
al destrozar la luna.
Nuestro enigma se devela
a la intemperie.
La oscuridad abraza
nuestras sombras.
La lluvia ha cesado
mientras descalzos recorremos
laberintos de horas.
Entradas
Nada más oportuno para tu lírica, como un día lluvioso como hoy donde el tiempo se eterniza tras el cristal de una ventana. Felicidades
ResponderEliminarAporta: silencios, lugares recónditos, agua, relojes, noche ...y huellas impregnadas en la calle de un sujeto desnudo.
Un magnífico trabajo de nuestra querida autora, Alejandra Ferrazza, que además se da "el lujo" de renovar la tópica de los poemas con lluvia, tantas veces abordada, desde Benedetti a Jorge Luis Borges, pasando prácticamente por la mayoría de los autores que conocemos. Y lo hace con una fuerza expresiva y una capacidad para impactar la sensibilidad del lector, que nos lleva a agradecerle a SETRA por este nuevo aporte. Felicitaciones, Ferrazza!
ResponderEliminarLUIS BENITEZ (Buenos Aires)